Quesería Altenburger Land
Producción conforme a las recetas originales
La quesera Altenburger Land tiene una plantilla de 82 empleados y produce especialidades queseras conforme a las recetas tradicionales en un área de producción de 11.000 metros cuadrados. La empresa, fundada en 1897, produce especialidades artesanales de primera calidad a partir de leche fresca de vaca y de cabra suministrada por ganaderos del territorio atentamente seleccionados, con quienes entabla colaboraciones duraderas. Grüner Altenburger es desde hace muchos años la marca de queso de cabra de pasta blanda más popular de Alemania, gracias a su sabor suave y cremoso. Además de esta marca de queso de cabra, Altenburger Land produce también las especialidades de queso de vaca bajo los nombres Rügener Badejunge y Rotkäppchen. Con una capacidad de procesar alrededor de 23 millones de litros de leche de vaca y 6 millones de litros de leche de cabra al año, la empresa da gran importancia no solo a la calidad de sus especialidades queseras, sino también a la eficiencia energética y al cuidado de los recursos naturales, para lo cual ha implantado un sistema integral para la gestión de la energía.
El reto
Bobinas de hasta 30 kg de film estirable pueden sustituirse en la máquina
Altenburger Land cuenta con tres líneas de envasado con film estirable para sus especialidades queseras. Hasta principios de 2019, estas líneas utilizaban bobinas de 750 m con un peso de entre 10 y 15 kg como máximo. En vista de que los productos que se debían envasar cambiaban constantemente en un mismo día, y por tanto era necesario cambiar el tipo de bobina, la empresa decidió evitar el uso de bobinas más grandes. A principios de 2019, se modificó la gama de productos, por lo que ahora el departamento de embalaje dedica un turno al envasado de un solo producto en lugar de dos o tres, como se hacía hasta entonces. Esto supuso la necesidad de pasar a bobinas más grandes con una longitud de film de 1500 metros para poder asegurar una producción continua. Estas bobinas pueden pesar hasta 30 kilos, por lo que su desplazamiento pondría en apuros al encargado.
La solución
Roller Gripper in Full Stainless Steel
«Decidimos buscar una solución que nos permitiera sacar el máximo provecho de las bobinas más grandes y proteger al mismo tiempo la salud de nuestros trabajadores, sin cargar este peso sobre sus espaldas», cuenta Hendrik Kotzan, director del Área de Compras en Altenburger Land. «En FachPack pude ver las carretillas elevadoras de Hovmand, por lo que solicité una prueba de 14 días en nuestras instalaciones». A la empresa le gustó lo que vio y optó de inmediato por adquirir un INOX 90 S con pinza de rotación de 90 grados para rodillos. De esta forma, los trabajadores pueden tomar las bobinas de embalaje del palé, girarlas y montarlas directamente en la máquina, en lugar de hacer que dos personas las pongan en el lugar correcto utilizando pura fuerza muscular. El cambio de las bobinas resulta mucho más fácil. Debido a la larga distancia que hay entre el almacén y el área de envasado, los empleados de Altenburger Land tienen que trasladar a esta última varias bobinas al iniciar el turno. A continuación estas se montarán sin esfuerzo en las máquinas envasadoras durante el día gracias al INOX 90. Dado que los rollos deben elevarse a una altura de casi un metro, el mástil bajo del INOX 90 es la solución ideal. Los empleados pueden utilizarlo para efectuar maniobras y seguir teniendo una visión clara tanto de la máquina como de la bobina que debe montarse.
Altenburger Land ha optado por Hovmand también porque sus elevadores están disponibles en acero inoxidable puro, lo cual es indispensable para el uso en la industria alimentaria.
«Ya llevamos unas semanas utilizando el elevador de rollos Hovmand. Cualquiera que lo haya utilizado una o dos veces queda impresionado al instante. Es muy fácil de manejar y las bobinas de film pueden cambiarse rápidamente y sin esfuerzo. Los trabajadores notaron de inmediato la mejora».
– Hendrik Kotzan, director del Área de Compras
Conclusión
Cambio de bobinas optimizado, sin tensión para los trabajadores
La incorporación del INOX 90 ha permitido aprovechar al máximo las ventajas de las bobinas de film más grandes: se requieren menos cambios de bobina y la máquina envasadora puede funcionar por períodos más prolongados sin interrupciones. Al mismo tiempo, las bobinas pueden cambiarse rápidamente sin que los trabajadores tengan que verse sometidos a tensiones perjudiciales para la salud. El uso de bobinas más grandes y un mejor aprovechamiento de los palés han comportado un impacto positivo también en términos de ahorro, por lo que la nueva solución es una ventaja a 360 grados.